· Las jefaturas de División de los Gobiernos Regionales del país participaron en un encuentro nacional realizado en Concepción. Mayores atribuciones, aumento de recursos y de personal, así como un plan de infraestructura hídrica también fueron incluidos en la propuesta de descentralización.
Con la firma del “Acta del Biobío” – que incluye seis propuestas para aumentar la autonomía y poder de decisión de las regiones – y la posterior entrega al secretario de la Asociación Nacional de Gobernadores Regionales y también titular de la Región del Biobío, Rodrigo Díaz, concluyó el segundo Encuentro Nacional de Jefes de División de Infraestructura y Transporte que, en dos jornadas, se llevó a cabo en Concepción.
El programa incluyó una decena de presentaciones sobre competencias de gestión, experiencias exitosas y proyectos birregionales, a través de una decena de exposiciones, de los propios participantes e invitados especiales como, por ejemplo, del ex ministro de Obras Públicas, Transportes y Telecomunicaciones y actual director ejecutivo del Consejo de Políticas de Infraestructura, Carlos Cruz.
Al momento de la evaluación, la máxima autoridad del Biobío destacó que “la descentralización se está construyendo día a día y, para eso, la coordinación entre los distintos actores que la estamos ejecutando es extremadamente relevante. Por eso, me parece que haber reunido a los jefes de división de todo el país a trabajar en la región contribuye a generar insumos que, desde la Asociación de Gobiernos Regionales, nos van a permitir enfrentar el proceso de traspaso de competencias de mejor manera, fundamentando cada uno de los requerimientos que le haremos al gobierno central”.
Por su parte, Óscar Ferrel, a cargo de la División de Infraestructura y Transporte en el Biobío, hizo hincapié en que, a su juicio, sería un importante avance: “Llegamos al acuerdo de implementar en cada región un sistema de concesiones. Creo que allí hay una gran oportunidad de capturar nuevos recursos para la región, para que el Estado se pueda dedicar a hacer más caminos básicos o postas rurales, donde los privados no van a invertir nunca, porque no les generan rentabilidad. Nosotros debemos ir a los proyectos donde haya rentabilidad social y, por lo mismo, esta atribución nos permitiría adelantar inversión pública que necesitamos para retomar el crecimiento que la región se merece”, subrayó.
Sobre las principales y transversales demandas, dijo que “tenemos un problema que es la falta de personal y con muchas tareas que realizar. Adicionalmente a eso, las actividades deben tener sus recursos, porque el Gobierno Regional no debe subsidiar al Gobierno central, porque si ellos piden algo, nos deben dotar de colaboradores y recursos financieros”.
En ese sentido, su par de la Región de Valparaíso, Belén Paredes, enfatizó en que, a pesar de la diversidad existente en cuanto a población, geografía, clima o matrices productivas, existe una evidente coincidencia en el diagnóstico del sector. “Un problema común, que nosotros lo vemos también como una oportunidad, tiene que ver con el proceso de descentralización, el que estimamos que resulta vital para todas las acciones que podamos ejecutar”, comentó.
Cabe destacar que el “Acta del Biobío” también considera empoderar y relevar el rol de las divisiones; potenciar proyectos bioceánicos; elaborar planes maestros de conectividad (terrestre, aéreo, marítimo, fluvial y lacustre), digitalización y una estrategia de infraestructura hídrica, con énfasis en el aseguramiento de agua para consumo humano, animal y de protección medio ambiental.