Gobierno Regional capacitó a dirigentes sociales en liderazgo con perspectiva de género

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  • Este es el tercer ciclo del programa de capacitación, el cual potencia el rol de las mujeres dirigentes en la sociedad.
  • En los módulos se reforzó la labor de los dirigentes y dirigentes de organizaciones comunitarias, a través del diálogo y el aprendizaje participativo.

La Escuela de Fortalecimiento del Liderazgo Social y de Mujeres, es una iniciativa financiada por el Gobierno Regional, que capacitó a 266 dirigentes sociales de la región sobre enfoque de género y liderazgo social, entregando respuesta a la actual discusión en torno a la inclusión social de territorios y personas en situación de vulnerabilidad.

Iván Valenzuela, Gobernador (S) de la región del Biobío, dijo que estás instancias son fundamentales para potenciar el rol social de los dirigentes. “Estoy es muy importante lo que está haciendo el Gobierno Regional en apoyar los liderazgos de los dirigentes, a través de adquirir competencias, habilidades y conocimiento sobre distintas materias. Lo que contribuye al fortalecimiento de la cohesión social, mediante estás distintas instancias”.

El programa se realizó a través de la organización de tres fundaciones como Trascender, Fundación Honra y Colectiva – Justicia en Derechos Humanos. Estas instituciones estuvieron a cargo de ejecutar los módulos del curso, donde enseñaron teoría de género, mujeres y participación política, Oratoria, liderazgo femenino, entre otras.

Gonzalo Osorio, encargado Zona Sur de la Fundación Trascender, explicó que estas capacitaciones brindaron una respuesta a las necesidades que los mismos dirigentes expusieron sobre liderazgo. “A través de distintas metodologías participativas, de trabajo en equipo, resolución de conflictos, fuimos abordando los distintos temas, justamente buscando el desarrollo de sus competencias y sus capacidades como dirigentes sociales”.

La presidenta de la Junta de Vecinos 5-A de Chiguayante, Norma Godoy, indicó que “para mí fue muy importante esta capacitación, porque aprendí como manejar este rol, junto a este grupo de personas. Esta escuela nos entregó muchas herramientas y oportunidades para que nosotros mismos podamos entregar las soluciones que necesiten nuestros vecinos”.

La iniciativa tuvo una duración de 24 sesiones, durante 18 meses, en la cual participaron representantes de los territorios en situación de exclusión y vulnerabilidad.

 

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