Ante los hechos de fuerza ocurridos en Cañete, con resultado de muerte de dos personas y heridos, el Gobernador Regional, Rodrigo Díaz, realizó un punto de prensa donde junto con señalar que conversó con los alcaldes de Cañete, de Lebu, de Contulmo, de Tirúa, con el constituyente de pueblos originarios de la Región, Adolfo Millabur; con el director del Instituto de Derechos Humanos, Sergio Micco; y también con el jefe de Defensa Nacional del Biobío, contralmirante Jorge Parga, sostuvo:

“Frente a estos sucesos, lo primero que quiero pedir como jefe del Gobierno Regional del Biobío es que estos hechos sean investigados y que se clarifique una versión frente a la opinión pública que determine la verdad de lo acaecido. Esto se lo pedimos al Gobierno de Chile, al jefe de la Defensa, también al Ministerio Público, que se establezca la verdad sobre lo ocurrido esta tarde”.

Asimismo, agregó: “Esto es: crónica de unas muertes anunciadas. Cuando levanté mi voz hace unas semanas atrás diciendo que establecer para un problema complejo una solución que abordaba un aspecto de la materia y que lo hacía con caracteres parciales, lo hice previendo que esto podía ocurrir”.

A lo que continuó: “Lo que creo que se debe hacer es optar por el diálogo y por la comunicación con las personas que viven en la Región. Se lo dijimos al Presidente Piñera a través de una carta y cuando estuvimos en el trayecto ferroviario entre San Pedro de la Paz y Concepción; no por el ánimo de generar una polémica, se lo dije porque vivo en la Región del Biobío. Porque la gente que somos del Biobío sabemos lo que pasa”.

“Cuando he conversado con el alcalde de Cañete me ha transmitido el temor que sienten las personas. Entonces, cuando decimos esto es porque nos duele lo que pasa en la Región. Y vemos que lamentablemente no se está aquilatando un problema complejo y que frente a problemas complejos necesitamos no una cuña, necesitamos un abordaje integral para evitar que más gente resulte muerta o herida o afectada en su vida cotidiana”, sostuvo.

Además, informó: “Yo mañana tenía que viajar a Punta Arenas, producto de un encuentro que teníamos de Gobernadores Regionales. Suspendí mi viaje. Y me voy a quedar haciendo política en mi región. Voy a mantener mi mano extendida frente al Gobierno de Chile para que tengamos versiones de los hechos y también para que caminemos en la solución de un problema político, económico, social y cultural. Pero también voy a tomar contacto con las distintas candidaturas presidenciales, porque veo que la mano extendida no ha sido recogida. Y lo voy a hacer, porque me importa lo que pasa en la Región del Biobío y con su gente. No podemos seguir perseverando en la violencia y el temor que existe en la Provincia de Arauco, particularmente en el cono sur, de tener una escalada de violencia a raíz de estos fallecimientos el día de hoy es un temor sentido por la población y no queremos que eso continúe”, concluyó.