- En una segunda cita de coordinación, ahora desarrollada en Temuco, las máximas autoridades de las regiones del Biobío, Araucanía y Ñuble manifestaron reparos frente al proceso de reconstrucción que desarrolla el Gobierno de Chile.
- El Gobernador del Biobío, Rodrigo Díaz, pidió al Gobierno de Chile “dejarse ayudar” y buscar caminos distintos para llegar pronto con soluciones para las familias que sufrieron los efectos de la emergencia por incendios.
En Temuco, precisamente en las dependencias del GORE Araucanía, se desarrolló una nueva cita de coordinación entre los Gobiernos Regionales de Ñuble, Biobío y Araucanía con motivo del escenario de reconstrucción que enfrentan las tres regiones luego de la emergencia por incendios forestales.
Tras un primer episodio en Chillán, donde se compartieron buenas prácticas de reconstrucción, se socializaron brechas y se solicitó una audiencia con el Presidente de la República, Gabriel Boric, hoy los Gobernadores Rodrigo Díaz, Oscar Crisóstomo y Luciano Rivas manifestaron su preocupación ante la lentitud del proceso de reconstrucción y la baja habitabilidad de los inmuebles instalados.
“Esta segunda reunión la realizamos en un tono de preocupación. Creemos que las medidas que se han tomado por parte del Gobierno han sido lentas, y estamos muy preocupados, porque estamos en una zona donde el invierno ya está llegando y la gente aún no tiene soluciones definitivas. Aquí hay avances que establece el plan de Gobierno, donde hablan de que ya están construidas (viviendas) en el mundo rural, pero el problema es que tampoco están habitables. Como Gobiernos Regionales insistimos en que estamos para ayudar, queremos que el Gobierno Central se deje ayudar. Esto no es una competencia, nosotros hemos tenido la posibilidad de ser mucho más efectivos y hemos dado muestra de que los Gobiernos Regionales podemos ser rápidos. Ya en Chillán solicitamos una reunión al Presidente de la República, reunión sobre la cual aún no recibimos respuesta. De esta reunión volveremos a oficiar al Presidente, porque hemos visto que se han hecho mesas en Santiago para la reconstrucción y los Gobiernos Regionales no estamos presentes”, manifestó el dueño de casa, Gobernador Luciano Rivas.
Por su parte, el Gobernador del Biobío, Rodrigo Díaz, indicó que “el Gobierno de Chile ha definido una estrategia para resolver la situación de quienes tuvieron destrucción total de sus viviendas: una parte la hace el Senapred, que es la instalación de mediaguas, y la construcción de viviendas definitivas corre por cuenta del Ministerio de Vivienda. Respecto de la construcción de mediaguas, la cantidad de viviendas habitables, es decir, con luz, con agua y con alcantarillado, es decir, habitables, es cero. En el caso de la Región del Biobío hay nueve mediaguas paradas y hay otra cantidad en desarrollo que supera levemente el centenar. A usted no le sirve tener mediaguas paradas, a usted lo que le sirve es una solución definitiva”.
“Es raro que Senapred solo entregue la estructura, aunque venga con baño, porque usted comprenderá que un baño sin agua o conexión lo que genera es un riesgo sanitario. Es raro, porque se salta de ahí a las viviendas definitivas, donde queda un espacio entre medio. Respecto de las viviendas definitivas, tenemos un segundo problema. La gente que se quemó es gente rural, y en el campo hay una cantidad importante de personas que no tienen títulos de dominio. Los datos que hemos recibido del Ministerio de Vivienda es que del 100% de las viviendas que ellos quieren construir, lo que está cumpliendo requisitos para ser adjudicatarios es solo el 22%. Cuando el Gobernador Rivas dice que estamos preocupados y queremos que el Gobierno nos deje ayudarlos para resolver esto, es porque hay que buscar caminos distintos para acudir en auxilio de las personas. Hay que buscar otro camino. Por ejemplo, el mismo Gobierno de Chile, para ir en ayuda, entregó un bono a las familias de un millón 500 mil pesos y de 750 mil pesos. La gente de campo ha construido sus casas mayoritariamente por auto construcción. Un camino innovador sería la entrega de recursos a las familias para que ellos puedan construir sus propias viviendas. No hay tiempo para esperar dos semanas que nos cuenten lo que quieren hacer”, añadió Díaz.
Finalmente, Oscar Crisóstomo de Ñuble, sostuvo que “los Gobiernos Regionales somos colaboradores, pero también haremos seguimiento de las medidas anunciadas por el Gobierno Central, y recalcar que el Gobierno Central necesita ser ayudado y estamos disponibles. Hoy no tenemos mediaguas habitables, por lo que tenemos una situación crítica y grave. También necesitamos medidas en el área productiva, las tres regiones tenemos cerca de 7 mil pequeños agricultores y pequeños propietarios que fueron afectados por los incendios y hoy no existe ninguna medida para ayudarlos a ellos. Queremos pedir al Gobierno medidas y un plan estricto, riguroso y más efectivo. Cabe recordar que a 2017 ya teníamos medidas, por lo tanto, aquí tenemos un retraso respecto de las medidas tomadas en 2017”.
En las próximas semanas, las autoridades se reunirán nuevamente para analizar los avances de sus respectivos planes de reconstrucción y de los anuncios que realice el Gobierno en la materia.